Cartas de lectores: ¡No me abandonen!, ecuatorianos, hijos queridos

Yo no quiero ser como mi hermana mayor Venezuela

La terrible enfermedad que desde hace más de diez años me azota, dañando casi todos mis órganos internos y externos, quiere nuevamente hacer su aparición, con ecos falsos que pretenden engañar a mi naturaleza. He tomado las medicinas necesarias que me recetaron los prestigiosos que me atendieron, durante mucho tiempo, pero sus funciones cesaron sin sanar mis dolencias, porque eran un laberinto encubierto, y entonces tuve que ponerme en manos de un joven profesional de buena voluntad, sin mayor experiencia, pero con madera de estadista, que prometió sanar y cambiar mi vida. 

Pero mi naturaleza tenía tantos desastres como carencias: desnutrición, infestación, narcoadicción con terror incluido, cleptomanía y podredumbre, pues mi enfermedad hizo ‘metástasis’ en mi pobre humanidad; tanto, que no pude sanarme en la totalidad porque una tribu de parásitos, llenos de tentáculos, invadieron mi ser por dentro, por fuera y lo tienen esclavizado. 

Gracias a mi querida, respetable e intachable hija Diana, que a fuerza de investigación pudo descubrir el cáncer que atacaba a cada uno de mis órganos, ahora estoy en camino para mi sanación. A mi lado están los hijos que han saqueado mis ahorros ‘dizque’ para curarme. 

También mi hija Luisa, la descarriada, que quiere ser mi dueña para sanarme con la receta del Socialismo Siglo XXI, con las medicinas de pobreza, cero educación, cero religión católica, terrorismo; sin dólares para subsistir pero sí con dolores para morir; mejor dicho quitarme mi dignidad como persona y que no tenga un futuro de bienestar y progreso.

Yo no quiero ser como mi hermana mayor Venezuela, otrora ‘Tierra de Gracia’, bella y rica, tanto que hasta por sus venas corría sangre de oro negro. Pero hoy por sus malvados hijos está secuestrada, pobre, humillada y la mayoría de su descendencia vaga por el mundo pidiendo un techo y un pan; es la pobre de la familia. ¡Hijos de mi corazón, escuchen a su madre patria Ecuador!, el país de los cuatro mundos: el 13 de abril elijan a mi hijo predilecto Daniel, para que continúe en el poder y me sane con su receta de ‘un nuevo Ecuador’.

Myrna Jurado de Cobo