Cartas de lectores: Lo que me enseñaron los apagones
Lo que vivimos día a día nos deja lecciones valiosas; he aprendido de los demás y de mí mismo. La falta de energía eléctrica ha modificado mi quehacer, estoy más pendiente de suplir lo que no tengo; la luz de la creatividad ha surgido para ayudarme. No tengo luz cuando lo necesito, pero tengo la luz de la inspiración para escribir.
La oscuridad se apodera de las calles de mi ciudad y a mi alma llega la iluminación de Dios; no estoy apagado sino más encendido. Podemos culpar a nuestras autoridades por la falta de previsión, eso ocurre con muchísima frecuencia; alguien debe cargar con las culpas ajenas.
El reclamo es comprensible cuando hay una necesidad insatisfecha, pero que no se apague en ti el sentido de justicia. ¿Cuándo comenzó a gestarse este problema? Lo que vivimos es la consecuencia de una mala decisión, alguien no hizo lo que debía hacer y nos perjudicó; ahora tenemos que buscar la mejor solución y la experiencia que atravesamos nos enseña a no cometer el mismo error. ¿Cuál es la solución para la crisis energética de Ecuador? ¿Qué hacemos para que la crisis no vuelva a ocurrir? ¿Cuáles son las lecciones que hemos aprendido durante la crisis? En la crisis surgen los liderazgos, se motiva la creatividad, hay un beneficiado y un perjudicado, aprendemos a sobrevivir. Isaías 29:24...Y los extraviados de espíritu aprenderán inteligencia, y los murmuradores aprenderán doctrina. Reina-Valera. 1960.
Agustín Romero