Cartas de lectores | Los medios y su afán de querer el bienestar de todos

Entonces, por costumbre, los políticos crean un antagonista para decir que no comprenden lo que quiere decir la ciudadanía...

Hace poco un medio de comunicación hizo una nota periodística cuyo título decía algo así: “Xxx: el administrador gastó $ en obras dentro de urbanizaciones”. Todo bien hasta ahí, pero cuando se leen las letras pequeñas, sí deja una interrogante: “En tanto, Xxx se contactó con el Municipio de Xxx para conocer por qué se ha priorizado e insistido con estas obras, cuando en Xxx faltan otros trabajos para toda la comunidad, que recuerda la promesa del gran parque público o el malecón. Sin embargo, hasta el cierre de este artículo no hubo una respuesta”. Para mí, una pregunta válida. Es como preguntar al administrador qué se debe hacer primero. ¿Hacemos una UPC o una calle? Ambas obras son buenas, pero existen criterios y variables a las cuales se deben acudir para dar respuesta. Un medio de comunicación, durante una entrevista al administrador, se atrevió a hacerle una pregunta al respecto de la nota mencionada y su respuesta me pareció típica de un político que tacha a las personas o medios de comunicación que no se alinean a su postura, olvidando que muchas veces hacen ver una observación válida. Volviendo a la pregunta del medio: ¿por qué se ha priorizado e insistido con estas obras, cuando faltan otros trabajos para la comunidad?, esta no es política, ni creo que existan personas a las que se les pague para decir que se sienten desatendidos; más bien lo contrario, le piden una explicación al administrador del porqué se prioriza esta obra o la otra. Una respuesta válida sería: “La verdad es que debo hacer la calle bajo mi responsabilidad, no existe reglamento que me exija hacer la UPC”. Otra posible respuesta sería: “Hago la UPC ya que 79% de la población quiere que se la haga, y según datos de mi asesor, si la hago logro dar tranquilidad a este sector y se descongestiona otra calle; así me dará tiempo para conseguir recursos y poder arreglar la calle que se necesita”. Ambas respuestas tienen un criterio establecido antes, demuestran conocimiento, y eso es lo que demandan en la nota del periódico; no busca desprestigiar a nadie. El administrador en su entrevista y durante la transmisión en los comentarios creó división, y lo peor fue el comentario de un asesor: “Excelente trabajo”. Olvidó que él es asesor y debería dar datos sobre por qué se atrasa o se toma la decisión de priorizar esas obras. Entonces, por costumbre, los políticos crean un antagonista para decir que no comprenden lo que quiere decir la ciudadanía en los medios”.

David Ronquillo Loy