Cartas de lectores: Un mundo de corrupción

Gente de mi patria: ¿cuándo aprendiste o quién te enseñó a desconocer a tu Dios, a violar sus mandamientos sagrados y sus acendradas leyes? ¿Dónde aprendiste a deshonrar a tus padres? ¿Quién te dijo que tenías derecho de matar embriones usando las manos bendecidas de los hijos de Hipócrates? ¿Qué demonio te enseñó a matar a punta de balazos? ¿En qué lugar aprendiste a adulterar con tus pensamientos y a entorpecer tu vida con viles acciones repletas de lascivia y lujuria? ¿Dónde aprendiste a hurtar y a robar con descaro y alevosía? ¿Quién te dijo que era bueno robar en hospitales, ministerios, en contratación de obras públicas o en arcas fiscales? ¿Cómo aprendiste a arranchar celulares y billeteras ajenos? ¿A quién aprendiste a decir y repetir mentiras para transformarlas en posverdades que desgarran el sagrado velo que cubre a la verdad? ¿Quién te enseñó a codiciar lo que no es tuyo: la mujer del vecino, sus hijas, criados, casa, auto y riqueza, logrados con esfuerzo y trabajo? ¿Cuándo te llenaste de protervia, de hombres serviles y esclavos del mal, jueces venales, fiscales torcidos, políticos malintencionados, gatilleros furiosos, ladrones avezados, dinamiteros contumaces y toda suerte de gente de mal vivir? ¿Quién te enseñó a llenar tu casa de polvos blancos y otras drogas que enajenan, de armas de todo tamaño y calibre, de tacos de dinamita y billetes de mala procedencia? Regresa al buen camino, endereza tus veredas, aprende a buscar el Reino y su justicia; la vida es corta y el castigo puede ser eterno…

Gustavo Vela Ycaza