Cartas de lectores: Queriendo, todo puede renacer

Comprenderse es primordial para salir de la oscura cámara de los horrores y entrar en la luz, lo que demanda paciencia, persistencia, ante un mundo dividido y desbordado por mil batallas, que lo único que hacen es confundirnos y que no prevalezca el sentido común, ni la diplomacia para aminorar las tensiones. Hay que poner más corazón en el obrar, fuente y origen de todo bien. A poco que nos adentremos en las políticas gubernamentales diseñadas para impulsar el crecimiento económico mundial, nos daremos cuenta que están teniendo un efecto devastador en la salud mental de las personas, sobre todo en los desfavorecidos y en situación de pobreza. Solo se ve bien con el corazón, del que emana la auténtica vida, al ser el único capaz de fecundar la intensa corriente de vida interior, los sueños, que son lo que verdaderamente nos ilusiona y transforma. Nuestra principal obligación es reconstruirnos desde nuestras propias miserias. Ojalá seamos capaces de darle espíritu a esta tierra; queriendo, todo puede renacer, es cuestión de cultivar el abrazo conjunto, solidario y fraterno.

Víctor Corcoba