Cartas de lectores: Regresen -sálvense- todos, menos Verónica
¡La ciudadanía de conciencia crítica tiene la palabra!
La Cancillería ecuatoriana -peón del tablero de ajedrez del Ejecutivo- ante la gravedad del conflicto que atraviesa Israel con el Estado Islámico, exhorta a todos los compatriotas residentes en ese país a que arreglen maletas y viajen a lugares más seguros en salvaguarda de sus vidas, ante el inminente peligro que ello implica, con la excepción de la vicepresidenta Verónica Abad, asignada -en un hecho insólito y peculiar- como embajadora en Tel Aviv, porque ella debe cumplir con la normativa establecida para las legaciones diplomáticas en el exterior; salvo que el ataque sea directo a la embajada y entonces ahí sí, salir, ya sea en condición ilesa, herida, grave o muerta.
Por las críticas recibidas ante su proceder -o a su conciencia - a última hora la envían con la misma función, de manera temporal, a Turquía.
Después de que disminuya el conflicto de Israel con el país en beligerancia histórica, deberá entonces retornar a la nación primeramente asignada.
Causa estupor observar el ensañamiento de Daniel Noboa, a través de Cancillería, contra Verónica Abad, por evitar que lo reemplace mientras dura su licencia como candidato a la presidencia, por el temor obsesivo de que le tiraría su andamiaje político, en una suerte que raya en la paranoia.
Mantenerla alejada, con cualquier estrategia, es una forma de blindarse contra ella, en lo que está inmerso también el ataque psicológico, de manera que mine el espíritu de Verónica, para que así cometa cualquier desliz de carácter constitucional que le facilitaría a Noboa deshacerse de esta funcionaria.
La forma de actuar contra esta mujer, ¿no lo deslegitima como persona?
Un presidente que abusa del poder, ¿será demócrata? ¿Tendrá el voto del feminismo y de las personas de bien?
¡La ciudadanía de conciencia crítica tiene la palabra!
Lenin Manuel Moreira Moreira
