Cartas de lectores | Sentir la paz de Dios en el alma
De prepararse para hospedar al Hijo del Ser Supremo, que viene a nosotros para allanarnos el camino
Es el momento preciso de corregirse, de llamarse al arrepentimiento, cada cual consigo mismo y con los demás. De prepararse para hospedar al Hijo del Ser Supremo, que viene a nosotros para allanarnos el camino.
En el atardecer de nuestros días también nosotros seremos juzgados según nuestra similitud o disparidad con el niño que está a punto de germinar en la desamparada cueva de Belén, puesto que Él es la pauta de medida que el Poder Celestial ha dado a la humanidad. Resuena un encargo en este tiempo, que nos rebosa de luz y de pasiones, y que nos rebasa de sueños cada día; que nos mueve a levantar la mirada y a sentir la paz de Dios en el alma.
Víctor Corcoba