Cartas de lectores: ¿Unidad de razas y culturas?
Que aunque nos hubiéramos naturalizado no éramos americanos y que no nos querían en Estados Unidos
El caso de Elián González transfiguró a la nación americana. Lo importante no era la vida del “balserito” sino la lucha entre dos gobiernos con una historia de odio, intrigas y confrontación. El niño fue rescatado el Día de Acción de Gracias por dos pescadores americanos frente a las costas de Florida quienes lo entregaron a sus familiares en Miami -su madre había muerto ahogada en su intento de fuga de la isla cárcel-.
Los exiliados cubanos se lanzaron indignados a las calles de en protesta por su repatriación a Cuba, en una de las mayores movilizaciones en esta ciudad en su historia reciente. Miles salieron en pie de guerra contra el gobierno de Clinton, acusándolo de traicionar a los cubanos para complacer a Fidel Castro y violar leyes nacionales e internacionales.
Pero las cosas no quedaron ahí. Millares de americanos de todos los colores, sexos y razas se lanzaron también a las calles en un ataque frontal a los cubano-americanos. Nos dijeron que volviéramos a Cuba. Que aunque nos hubiéramos naturalizado no éramos americanos y que no nos querían en Estados Unidos.
Alfredo Cepero