Confianza y prosperidad

Nuestra mente tiene un atributo principal y la capacidad de crear en todo momento; lo importante es pedir con fe, dar, recibir y dejarlo fluir. La conciencia de prosperidad nos da un sentimiento profundo de abundancia, amor, gozo, paz, armonía y confianza, y la libera del miedo de la escasez. Como resultado natural llega la manifestación y sanación de toda la experiencia de vida. La fuente de la prosperidad consiste en actitud de dar y recibir, es la esencia divina indestructible. Tener actitud positiva y gratitud constante para vivir próspero y tener esa espiritualidad que te motiva a hacerlo. La verdadera prosperidad es resultado de la confianza en nosotros y nuestros semejantes.

Javier Valarezo