¿Ecuador, país de apuestas?
El defensor del pueblo, de oficio debe actuar, dado que el tema es de conocimiento público.
En 2011 el país votó en consulta popular por la eliminación de juegos de azar (casinos, máquinas traga monedas, sorteos, etc. y cualquier forma de apuestas); por su asistencia hospitalaria, educativa y otras actividades de servicio social, la Junta de Beneficencia de Guayaquil (JBG) fue excluida de esta disposición. Pero esa deferencia ha tomado otro rumbo; en centros comerciales ya no solo hay islas de venta de lotería, sino verdaderos locales de promoción del juego; casinos, a toda vista. Siguiendo el ejemplo, en varias ciudades están colocando al pie de despensas, negocios de barrio, etc., máquinas traga monedas, lo que atrae en especial a los niños. Mi sorpresa va más allá en los anuncios televisivos, en especial de transmisión del fútbol: se insta a apuestas para ganar cientos o miles de dólares. Estas promociones tienen respaldo de la JBG y Cruz Roja, lo pasan rapidito pero es posible verlo. ¿Quién no ha ido a un bingo? Es algo social, esporádico, de intención puntual… pero apuestas y juegos permanentes inducen al vicio, la ludopatía; el juego lleva a la adicción y ello destruye a la persona, a la familia, a la sociedad; por ella se pierden trabajos, se destruyen matrimonios. La ludopatía es una enfermedad psicológica y mental altamente destructiva. ¿Cómo dos instituciones que velan por la salud, ejemplo de honorabilidad, respeto y trabajo, están apoyando algo destructivo y no legal? ¿Dónde están las autoridades? El defensor del pueblo, de oficio debe actuar, dado que el tema es de conocimiento público.
Daniel Uyaguari Zh.