Fecundación in vitro vs. otros tratamientos contra infertilidad
Entre las diversas opciones que desde un principio se barajaron para los embriones extra que no se implantarían en el útero materno en los procedimientos de fecundación in vitro, la menos discutida fue la de mantenerlos vivos en congelación. Para ello se habilitaron técnicas de crioconservación en nitrógeno líquido. Pronto se vio que no era una buena solución pues se generaba tal cantidad de embriones, que era imposible que la madre o la pareja progenitora pudiera plantearse rescatarlos para futuros embarazos. Desde el conocimiento que aporta la Biología Celular, la Embriología y la Genética, tras la fecundación se produce una nueva vida humana, con identidad propia. A veces las causas de la infertilidad son fáciles de corregir mediante un tratamiento farmacológico, sin necesidad de recurrir a los riesgos de la artificialidad, ni a la falta de respeto a la dignidad humana que supone la fecundación in vitro.
Mario Monteverde Rodríguez