Nueva ola de contagios

Las autoridades de este país no entienden o no quieren entender. La situación cada día está más caótica. Los hospitales públicos y privados tienen sus camas completamente llenas con pacientes de COVID-19. La gente no entiende ni quiere entender y pensó que con la primera ola de contagios era suficiente. Ya está una segunda ola como producto de la celebración de las festividades de fin de año y en menos de veinte días se van a celebrar elecciones generales de presidente de la República, asambleístas nacionales y provinciales y parlamentarios andinos, elecciones que no le interesan a nadie, solo a los políticos que están participando en ellas. Allí también avizoro una nueva ola de contagios. Ya está aquí una primera dosis de vacunas que no satisfacen los requerimientos de la población porque no son las suficientes para combatir la pandemia. Una de las soluciones debería de ser militarizar el país en aquellos lugares donde la población se ha contagiado, porque se ve que las multas impuestas no surten los efectos esperados. Vacunar a los ecuatorianos debe de ser una prioridad, pero a través de una buena planificación: qué, cómo, cuándo y dónde. 

Roberto Flores