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Arturo Moscoso Moreno | Autocracia S. A.

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...hoy más que nunca, es crucial recordar que la democracia no es un estado permanente

En su último libro, Autocracia S. A., Anne Applebaum expone, a través de un análisis bien sustentado, cómo los autoritarismos modernos han tejido redes transnacionales de apoyo para desafiar la democracia. Dentro de los autócratas enumerados, la figura relevante en Latinoamérica es la de Nicolás Maduro, quien no solo ha cimentado su poder a través de la represión, sino también mediante alianzas internacionales que le han brindado respaldo económico, político y simbólico.

En el contexto ecuatoriano, el correísmo ha sido uno de los principales defensores de Maduro. Todos vimos recientemente a uno de sus acérrimos partidarios celebrando en Venezuela el reciente fraude electoral. El respaldo del correísmo a Maduro ha sido constante y público, minimizando la crisis humanitaria en Venezuela e incluso justificando violaciones a los derechos humanos.

Esta conexión no es fortuita, sino parte de una estrategia que Applebaum describe como la “internacional de las autocracias”: una red donde el apoyo de otros autoritarismos sirve para proteger a regímenes que pretenden mantenerse en el poder a cualquier costo

Esta alianza tiene implicaciones profundas para Ecuador. Si el correísmo vuelve al poder, lo más probable es que repita estrategias que ya conocemos: cooptación de instituciones democráticas, debilitamiento de la prensa independiente y uso del aparato estatal para perseguir a disidentes, todo esto además con el apoyo de Autocracia S. A.

Así, hoy más que nunca es crucial recordar que la democracia no es un estado permanente, sino un sistema que requiere vigilancia constante. Permitir el regreso de quienes demostraron hasta la saciedad su talante autoritario y que expresan sin ambages su afinidad con las autocracias, representa no solo un retroceso para Ecuador, sino también un fortalecimiento de la red de autocracias que, como señala Applebaum, amenaza con redefinir el futuro político de América Latina.

No podemos ignorar que el retorno del correísmo probablemente nos convierta en parte de Autocracia S. A., con consecuencias devastadoras, como las que se viven en Venezuela.