Carlos Vera: No repetir los mismos errores

Un buen comienzo sería no repetir los mismos errores
La crisis política del último año y medio culmina mañana, con la elección de un nuevo presidente o presidenta.
En caso de que sea Luisa González, el escenario es predecible: el correísmo pondrá en marcha su agenda alrededor de la impunidad y el retorno al poder de sus líderes. Aprendieron hace mucho que el poder no se suelta y acabarán con pilares democráticos como la sociedad civil, la oposición y la prensa. Seguramente gobiernen décadas. Esa agenda es ampliamente conocida y no hay mucho más que comentar al respecto.
En caso de que el ganador sea Noboa, el escenario es difícil de predecir, más allá de la oposición brutal que enfrentará en caso de no transar con la mafia política. Van para él estas sugerencias en caso de que la mayoría del país le encargue el mandato.
No transe con la mafia política a cambio de gobernabilidad. Será una trampa. Cuando no encuentre suficientes aliados en la Asamblea, apóyese en el pueblo que lo eligió. Consulte al país sobre reformas vitales para combatir al crimen organizado y darle institucionalidad al país. Usted depende del pueblo, no de los golosos que tocarán su puerta a cambio de favores desde el día uno.
Limpie al Estado de las mafias. Poderosos enemigos encontrará al interior, boicotearán su gestión, ya sea por ideología o por franca corrupción. O los barre usted o a usted lo barren, contaminando a su equipo.
No tolere un gramo de corrupción. Habrá sapos, siempre hay. Si descubre en su círculo a uno, condénelo sin ambages. Son esos los que traicionan el mandato y lo mancharán rápidamente si no reacciona rápido y contundentemente.
Véndale al país un sueño y comuníquelo con pasión. La comunicación no hará milagros. Una gestión impecable sí puede hacerlo y la comunicación la dará a conocer.
Nombre a las personas más capacitadas del Ecuador en los cargos de seguridad. Esto parecería obvio, pero en el pasado han desfilado por esas funciones desde incompetentes bien intencionados hasta mafiosos de talla.
Finalmente, no olvide que las circunstancias lo pusieron aquí. Sus méritos recién estarán por verse. Un buen comienzo sería no repetir los mismos errores.