Claudia Tobar | El nuevo cálculo de la hora-hombre
El futuro del trabajo estará definido por procesos creativos, menos automáticos y más humanos
Desde la Revolución Industrial, la métrica de la hora-hombre ha sido fundamental para cuantificar el esfuerzo y tiempo requeridos para completar tareas laborales. Esta medida que considera las capacidades humanas, el entrenamiento y la complejidad de la tarea ha permitido estandarizar procesos y calcular el desarrollo de industrias enteras. Hoy enfrentamos una nueva realidad que exige recalcular la hora-hombre, integrando el apoyo de la tecnología. Esta transformación permite entender cómo la revolución tecnológica actual impacta en la eficiencia, reducción de errores humanos, automatización y mejora de procesos.
Tomemos un ejemplo concreto: si tres personas requieren 10 horas para procesar 1.000 pagos manualmente, esto equivale a 30 horas-hombre. Con inteligencia artificial el panorama cambia. Un sistema de IA puede automatizar hasta el 80 % del proceso, reduciendo el tiempo a solo dos horas con una sola persona supervisando. Si añadimos una hora de configuración del sistema, el resultado es: 3 horas-persona+IA frente a las 30 originales. Esta reducción impacta el tiempo y la inversión necesaria, optimizando recursos y multiplicando la capacidad del proceso. No obstante, en esta nueva lógica, el valor humano sigue siendo fundamental. Aunque las máquinas realizan tareas repetitivas con precisión, la supervisión, calibración y mejora de estos sistemas son roles exclusivos de las personas. La hora-persona+IA no solo mide la ejecución de una tarea, sino también la capacidad humana de gestionar, escalabilizar y dirigir estos procesos tecnológicos.
Los beneficios son claros: eficiencia exponencial, enfoque en tareas estratégicas y una notable reducción de errores. Pero con esta oportunidad viene también una gran responsabilidad: preparar a las nuevas generaciones para estos desafíos. El futuro del trabajo estará definido por procesos creativos, menos automáticos y más humanos. La verdadera reflexión está en cómo nos estamos adaptando a esta nueva era.
PD: Propongo llamar a este nuevo cálculo la hora-persona y la hora-persona+IA, terminología más inclusiva que reconoce a todos los actores involucrados en el mundo laboral.