Carmen Ojeda: Hablemos sobre procrastinación
Este acto responde a la tendencia que tenemos los seres humanos de evitar sentimientos
La procrastinación consiste en retrasar o posponer algo que tenemos que hacer aun cuando se cuenta con el tiempo y los medios para hacerlo; por ejemplo, una tarea que continuamos aplazando hasta el último momento, un pendiente laboral que nos está dando problemas o una difícil decisión que tenemos que tomar pero que no conseguimos hacerlo. Comúnmente esta conducta va seguida de un alto coste, como son sentimientos de culpa, ansiedad, estrés, inadecuación, frustración y baja autoestima.
Este acto responde a la tendencia que tenemos los seres humanos de evitar sentimientos y pensamientos difíciles o dolorosos, tales como el desagrado, la ansiedad o el miedo. Luchar o huir de estas emociones pueden ser las reacciones más naturales, sin embargo, esto mismo que nos otorga un beneficio a corto plazo se convierte luego en un problema cuando se transforma en un círculo vicioso que nos aleja de nuestras metas o de lo que queremos para nuestra vida.
Desde la psicoterapia abordamos este comportamiento humano de evitación a través de distintas técnicas, en primer lugar, dirigidas a la conciencia y aceptación de los pensamientos y emociones difíciles que surgen ante la tarea que tenemos enfrente. Consiste en preguntarnos: ¿qué pensamiento o emoción es el que me está generando malestar? Responder esto nos puede posicionar ante la lucha que estamos librando internamente y nos aporta consciencia frente a la procrastinación, dándonos la oportunidad de desarrollar estrategias que nos permitan ‘desengancharnos’ de esa lucha.
Es importante entender que el malestar forma parte de nuestra vida, y aprender a tolerarlo y gestionarlo muchas veces será la vía para continuar acercándonos hacia aquellas cosas que para nosotros son más significativas y valiosas, aquellas que a largo plazo nos representan mayor bienestar personal.
El trabajo consiste en ir poco a poco reemplazando aquellas conductas evitativas del malestar por otras conductas más comprometidas con todo lo que la persona considere valioso e indispensable en su vida.