Diana Acosta-Feldman | ¡‘Welcome’ to La Roca!
El caso Purga develó el secreto a voces de los pasillos de los juzgados
El ‘habeas corpus’, sin lugar a duda, ha sido la acción constitucional más abusada por los delincuentes, y ello lo podemos constatar en el caso Purga. Delinquen, los capturan, presentan el ‘habeas corpus’, encuentran un juez que les despache a la medida y salen libres.
El caso Purga develó el secreto a voces de los pasillos de los juzgados, mandando a la cárcel a los jueces que se prestaban para desnaturalizar esta acción.
La acción de ‘habeas corpus’ tiene por objeto recuperar la libertad de quien se encuentre privado de ella de forma ilegal, arbitraria o ilegítima, así como proteger la vida y la integridad física de las personas privadas de libertad (art. 89 CRE).
La Corte Constitucional ya definió los parámetros para el trámite del ‘habeas corpus’, a propósito del que fue concedido ilegítimamente el exvicepresidente Glas. Ahora resulta que el audaz sentenciado pretende volver al ruedo y con la misma cantaleta.
La Corte ha sido enfática, la excarcelación de un individuo con sentencia ejecutoriada corresponde únicamente a la justicia ordinaria, mas no mediante la acción del ‘habeas corpus’.
A saber, la privación de la libertad es ilegal cuando ha sido ordenada o ejecutada en contravención a las normas expresas que componen el ordenamiento jurídico; arbitraria, cuando es ordenada o mantenida sin otro fundamento que la propia voluntad o capricho de quien la ordena o ejecuta; o ilegítima, cuando es ordenada o ejecutada por quien no tiene potestad o competencia para hacerlo.
Malas noticias para el nuevo huésped de La Roca; la orden de privación de la libertad es legal, pues una jueza de la Corte Nacional de Justicia, quien tiene la competencia, giró la boleta de encarcelamiento y garantizó que se cumpliera el debido proceso; se han respetado las garantías constitucionales a quien mediante peculado se llevó el dinero de los ecuatorianos.
Se deben acabar los ‘habeas corpus’ para lograr la impunidad e incumplir las dos sentencias por recibir coimas de Odebrecht, por el caso Sobornos, por peculado.
Ni arbitraria, ni ilegal, ni ilegítima. ¡’Welcome’ to La Roca!