Fausto Ortiz: Nadie va a desdolarizar

Todos, hasta el último día indicarán que preferirán seguir dolarizados...
Conversando con interesados en el seguimiento de la economía ecuatoriana, desde hace muchos años el requerimiento principal ha sido que se los advierta pocos días antes de que algún gobierno vaya a desdolarizar y usualmente mi respuesta es que a ningún gobierno se le ocurrirá la idea de enviar un proyecto de ley que señale que el dólar dejará de ser el medio de pago que usamos los ecuatorianos. Todos, hasta el último día indicarán que preferirán seguir dolarizados como lo hemos estado los últimos 25 años de manera oficial y quizás más de 35 extraoficialmente. Veamos esto último.
Antes del Titanic y las siete armonías del expresidente Mahuad la economía ecuatoriana ya estaba dolarizada, pedíamos prestado en dólares, invertíamos en dólares, algunos ganábamos y pagábamos arriendos en dólares, entre otro tipo de transacciones. No se necesitó de ley para transar en la moneda que nos daba más confianza y servía de refugio para soportar el proceso de inflación y devaluación de los años previos al 2000.
Serán las malas políticas de los gobernantes de turno las que empujarán a los agentes económicos a buscar proteger su patrimonio, para el presente y el futuro. Si solo uno se ‘da cuenta’ de las malas políticas, no será capaz de hacer daño a la economía y al final del día no pasará nada y contará como una sobrerreacción a lo percibido. Pero si es demasiado obvio el error en la política, entonces se tornará en una avalancha que, dependiendo de su tamaño, será imparable y terminará logrando que el dólar finalmente nos abandone como moneda oficial, lo cual se irá acomodando legalmente hasta plasmarlo en la ley cuando sea cosa juzgada. Después de ese evento seguramente seguiremos transaccionando en dólares como en los años previos pero con un impacto enorme en nuestra situación financiera.
Pero, ¿qué se puede destacar como malas políticas o qué señales no quisiéramos ver para no hacerle daño a un sistema que, lejos de ser perfecto, nos ha traído predictibilidad y estabilidad?
En sucres, cuando había déficit, para pagar los gastos, se prendía la maquinita de hacer dinero, inflación y devaluación. En dólares esos gastos se deben financiar con deuda. El nivel de atrasos es deuda interna y terminó sobre los USD 5.000 millones (M). El gran financista local es el IESS y en algún momento dirá no puedo más. La deuda interna con las completas redistribuye la liquidez local, pero no aporta plata fresca para el crecimiento de la economía.
La señal más importante a observar es el acceso a financiamiento internacional para que el Gobierno pueda cubrir su elevado déficit fiscal y la manera de lograrlo será crítico. En el pasado, cuando se libró una batalla con los tenedores de deuda se tuvo que recurrir a deuda china usando petróleo como si fuera garantía. Esa puerta no se la ha querido usar en los últimos ocho años. Si no se llegan a identificar fuentes de financiamiento internacional adecuadas y las miradas se direccionan a las Reservas Internacionales creará cierto nerviosismo que será manejable en función de la percepción de desesperación del gobierno de turno.
La crisis económica saca furias internas con las que habrá que lidiar. Tocará alejarse del que le toque gobernar bajo la furia del ‘chiro’, que es la más peligrosa de todas.