Francisco Rosales: Nueve días
Alargar el proceso electoral hasta abril en espera de la segunda vuelta sería estancar más al Ecuador
En efecto, faltan nueve días para que Ecuador decida su futuro.
Las elecciones generales del 9 de febrero son trascendentales para el país. Escoge entre la continuación de la democracia con alternancia en el poder, y un grupo que cuando logra captarlo, no lo deja. Recurre a cualquier atropello.
No es teoría. La ciudadanía ha constatado la renuencia de la candidata de la Revolución Ciudadana, Luisa González -que no es líder sino segundona-, a pronunciarse sobre el régimen de Maduro.
Ni siquiera la insistencia de Fernando del Rincón, de CNN, para arrancarle con sacacorchos su concepto sobre el oprobioso gobierno de Caracas pudo vencer el miedo de González para revelar su postura.
Le avergüenza revelar su identificación con ese régimen, pero no se atreve a contradecir al caudillo prófugo que ya celebró el ‘triunfo’ de Maduro.
Los grupos de Sao Paulo y Puebla siguen activos en su objetivo de acabar con la democracia en los países de América Latina e implantar regímenes similares a las dictaduras de La Habana, Caracas y Managua. Ni el fraude descarado de Maduro, la persecución a la oposición y el éxodo de ocho millones de venezolanos cambian su postura
Agréguese el peligro que entraña el posible legislador Ricardo Patiño, que fue figura de los 10 años de Correa, desde el Ministerio de Finanzas, con la manipulación del mercado de bonos; la Cancillería, en la que destrozó el servicio diplomático y se dio la vergüenza de la valija diplomática cargada de droga enviada a Italia; el Ministerio de Defensa, en el que hizo lo posible para comprometer a las Fuerzas Armadas con la RC y cuando no lo logró, casi las destruye; y que, finalmente, estuvo prófugo por varios años para huir del juicio penal por haber llamado a la acción armada contra el gobierno de Moreno.
En la gravísima situación actual por la que atraviesa el Ecuador, alargar el proceso electoral hasta abril en espera de la segunda vuelta sería estancar más al Ecuador hasta conocer la decisión final.