Juan José Vilaseca Valls

"Juan José no tuvo miedo a la diversificación"
Conocí a Juan José al terminar los sesenta, quería invitarlo como accionista de una empresa que promoví en 1969. Le hice la presentación, contesté sus preguntas e ingresó con 20 % del capital. Para mí fue un privilegio tenerlo como accionista. Mi experiencia con él corresponde a los años 1969-1974. De Juan José había escuchado una década anterior cuando unos viejos ganaderos se referían a él como el joven que promete duplicar el rendimiento diario de leche por vaca. En aquellos años su organización era “pequeña”, tenía pocos negocios. El principal era la fabrica de envases Fadesa, dedicada a fabricar los envases para los productores de atún y un impresionante taller industrial al sur de la ciudad.
Juan José era ejemplo de ser metódico y puntual. Siempre me citaba a las 7 a. m., a la hora que llegaba, y trabajaba hasta las 12 p. m. y en la tarde regresaba a las 2 p.m. hasta terminar el día.
Mensualmente lo visitaba llevándole los estados financieros y el informe de actividades. La primera vez estaba construyendo un galpón y me llamó la atención ver a un obrero haciendo las tuberías con un molde. Le pregunté por qué no compraba las tuberías de Eternit y su respuesta fue que eran muy caras. Él siguió los consejos de Benjamín Franklin: “Un centavo ahorrado es un centavo ganado”.
Alrededor de 1974 vendió sus acciones al precio que él estableció. Lo dejé de ver, pero por la prensa seguí sus nuevos triunfos. En todas las actividades que posteriormente incursionó tuvo éxito. Quizás la plantación de mangos no llenó sus expectativas. Juan José no tuvo miedo a la diversificación: incursionó en negocios disímiles, prefirió la agroindustria. En algún momento estableció uno o más de sus negocios en otros países.
Después de aproximadamente 35 años, me lo encontré en un almuerzo y nos habían asignado sillas cercanas; fue la oportunidad para tratar nuevamente a un ser sencillo y agradable; desde 1974 su organización había crecido enormemente, pero era la misma persona. Este reencuentro fue hace aproximadamente 10 años. No lo volví a ver más.
Los jóvenes emprendedores tienen mucho que aprender de él.