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¿Qué le pasa?

Avatar del Ignacio Granja

Una vez más termino pidiéndole al mandatario que acabe con sus sueños de gobernar con el mamotreto vigente; le reitero, que ese montón de basura se lo come

Esta pregunta se la formulo a quien debe salvarnos de las fauces del prófugo y sus secuaces.

Se comete un crimen execrable y cobarde dentro de una escuela policial y a renglón seguido nos enteramos por la prensa de dos noticias que no tienen ni pie ni cabeza. De la madre de la víctima, exigiendo que se declare crimen de Estado al acto deplorable, lo entiendo. Una mujer con su mente confundida por el dolor de la pérdida puede generar ese tipo de pedido. Pero que el ciudadano presidente muy orondo le comunique a la nación que se va demoler el edificio donde se cometió el crimen, la verdad que se pasa.

Si esa fuera la solución a los crímenes, poco a poco nos quedaríamos sin edificios, habida cuenta de que estos actos delictivos aumentan cada día. Ese mal no se corta de esa manera. Por desgracia el mandatario así lo quiere hacer.

Si así fuera, se vería con beneplácito la destrucción del circo, con la salvedad de que se asegurara de que todos los payasos estén adentro. La patria estallaría de júbilo y a lo mejor designan al tiempo empleado como el del rescate del Ecuador.

Luego de lo expuesto, el amable lector puede tomarlo como una broma no muy alejada de los deseos de muchos de los que elegimos a quien nos salvaría de los estragos del Ian ecuatoriano, aunque podrían llamarlo Rafael, Lenín o el que se les ocurra.

Aquí también la EDUCACIÓN, así con mayúsculas, juega un papel de capital importancia, pues la ignorancia es la que ha permitido la existencia y proliferación de populistas e izmierdistas que buscan la aniquilación de los países en los que se asientan, destruyendo también a sus pueblos, quienes, embobados por falsas promesas de mejores días, vía dádivas y limosnas, cierran los ojos en espera de abrirlos y verse convertidos en seres adinerados, viviendo en mansiones, pero sin haber trabajado un solo día.

Una vez más termino pidiéndole al mandatario que acabe con sus sueños de gobernar con el mamotreto vigente; le reitero, que ese montón de basura se lo come. Solo le sirvió al prófugo que una vez ocupó la casa de Gobierno.