¿Serán capaces?

"Ya empacando para la retirada, debe importarle al gobierno muy poco hacer cambios de gente acostumbrada a los lleves, bajo cualquier modalidad"
Con este título, me pregunto si las personas que hicieron de las suyas durante la década perdida serán capaces de aprovecharse del regalo chino y su aparente solución con la vacunación anunciada para el mes de enero próximo, de forma que se avizora un negociado.
Ya empacando para la retirada, debe importarle al gobierno muy poco hacer cambios de gente acostumbrada a los lleves, bajo cualquier modalidad.
Quisiera creer que la vergüenza, si les queda algo, les impedirá medrar en un tema tan delicado, aunque cuando tenían los muertos en las calles tuvieron el desparpajo de robar.
Como las malas acciones no vienen solas, vemos atónitos las triquiñuelas forjadas en los organismos encargados de organizar, qué ironía, el proceso electoral, al punto que siguen a la espera para la elaboración de las papeletas con la lluvia de candidatos. Dirán a lo mejor que no alcanza la provisión calculada y propondrán el uso del ¡papel Flor!
El comprador insiste y el prófugo con su marioneta ya se ve con la nube rosada otra vez en la casa de gobierno para acabar de convertirnos en Venezuela, ya que para él han sido lo máximo de pureza las elecciones últimas, donde estuvo de ojo seco. Son las órdenes que acata.
El puente sur, obra concebida por profesionales probos que han demostrado su solvencia técnica y moral, volvió a ser mencionado por un guayaquileño que destacó sus bondades para el Ecuador, considerando que la carga hacia el Puerto beneficia no solo a la ciudad más importante del país, tema que no lo entienden en las alturas ni siquiera los costeños que treparon por el juego político y se ven afectados por una disminución del oxígeno cerebral. Fue objeto de promesas en las fiestas octubrinas por parte del gobernante que se va, por eso ahora me parece que nos tocará esperar al siguiente inquilino de la casa de gobierno para que se haga realidad una necesidad imperiosa que ha sido soslayada hasta por la señora alcaldesa.
Cada vez que se quiere una obra en esta provincia, se repite el mismo cuento. Si se la realiza, a las cansadas, naturalmente no cuesta lo mismo y ha sido modificado su proyecto original, por obra de algún burro sabio