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Cínicos

Avatar del Irene Vélez

"¿Estamos en el pico de esta pandemia? Sí, podríamos decir que estamos en la punta. Pero del iceberg"

La pandemia vino a desnudarnos. La corrupción había sido asintomática hasta que llegó el virus y empezaron sus problemas respiratorios. Daniel Salcedo es investigado por sobreprecio de fundas para cadáveres. ¿Y antes? ¿Qué sabemos de sus contrataciones públicas con el Estado desde 2009? La red mafiosa de contratos no nació con el COVID. Si lograron hacer negocios en condiciones excepcionales, imagínense sin toque de queda. Hoy la corrupción es sintomática por dos motivos: la indignación de un pueblo herido y la focalización de los puntos calientes a investigar. Esta vez el enriquecimiento no fue abstracto, de dinero lejano. Esta vez crecieron con nuestro dolor. Nos cobraron más para curar y enterrar, mientras perdíamos nuestros trabajos. En sus redes lloraban con nosotros y entregaban donaciones. En sus contratos metían su mano al bolsillo de la bata del enfermo. Cínicos. ¿Y su defensa? “No lo sabía”. “¡Persecución!” Basta. Hay tres aspectos a destacar de todo esto: (i) la presión ciudadana es lo único que nos salva. En marzo, Bryonna Taylor fue asesinada en EE. UU. por la policía. Entraron a su casa sin aviso, solo tumbaron la puerta. Su novio (asustado) reaccionó y empezaron los disparos. La movilización colectiva fue tal que hace diez días erradicaron legalmente esta práctica de la policía. Ahora más que nunca el periodismo investigativo no puede parar. (ii) Los jueces tratan de callarla. Su defensa: la justicia para hacer su trabajo debe estar por encima de la presión mediática. Y es cierto. La justicia debe responder ante la evidencia y no ante el clamor. Pero, ¿si no responde a ella sino ante apellidos? Nuestra actuación es una contrafuerza necesaria para no perder al país. Y, (iii) las sentencias son el único tratamiento para un país enfermo. Las necesitamos para que el “nadie está por encima de la ley” no sea letra impúdica. Las necesitamos como ejemplo para que piensen una, dos, quince veces antes de jugar con el pueblo. Las necesitamos antes de las elecciones de 2021, para ver quién merece nuestro voto. ¿Estamos en el pico de esta pandemia? Sí, podríamos decir que estamos en la punta. Pero del iceberg.