Rompecabezas electoral

"Lasso no entra. Al menos una certeza en este rompecabezas".
Esta semana ha sido políticamente convulsionada. Otto Sonnenholzner reaparece en la vida política tras casi un mes de silencio. Álvaro Noboa, sorprendentemente, no está tan mal. Guillermo Lasso reacciona ante estos escenarios. Empecemos por Otto. Su reaparición había generado amplia expectativa. Aplica el dicho: mientras más alto subas, más fuerte es la caída. Las reacciones a su entrevista con Tania Tinoco fueron de decepción. Tuvo ocho minutos en TV, donde no dijo nada. Repitió el discurso de hombre honrado, austero; de hacer política diferente. Y ahí empezó la disonancia. Hacer política diferente, tal vez mientras fue vicepresidente se lo creía. Pero ir a una entrevista a hablar bien de su gestión, minimizar a sus críticos y no concluir nada, no es política diferente. Es la escenografía más repetida del país. En caso que sea candidato debe apostar por otro discurso. Habla de unidad, pero (i) ¿con quién? La población en sí está harta de la clase política (el aparente repunte de Álvaro es evidencia de esto), y (ii) la unidad no arregla nada. Nadie va a comer de la unidad. Del trabajo sí. Cuidado convierte a la “unidad” en su bandera política. Debe apostar por otro discurso; vender su vicepresidencia no es suficiente. Como nunca, los ecuatorianos demandan propuestas, soluciones, no solo un héroe del pasado. Eso Guillermo Lasso lo tiene clarísimo, de ahí que sea de lo que más habla. Comunicacionalmente no puede hacerlo mejor, presentarse como un hombre preparado, con un plan de salida de la crisis. Videos donde pierde la templanza no ayudan. Perdiendo la compostura se lo ve: “No podemos tener un presidente que haya nacido de las entrañas del correísmo. Peor otros que nazca de las entrañas del morenismo. Ni tampoco (…). Vota por Álvaro, ¡ya que ch.…!”. Lo que dice ese mensaje es que no va bien en las encuestas. Que vio los números de Alvarito y (con más que justa razón) le indignó que estuvieran cerca a los suyos. Sobre su ataque a Otto, no creo que así se lo perciba, peor luego de su labor en la pandemia. Lo que también nos dejó claro es que en esa unidad, Lasso no entra. Al menos una certeza en este rompecabezas.