El nuevo año

Lo importante es obviar las promesas y enfocarnos en las credenciales de los candidatos
Atravesando los últimos días de este 2022 nos preguntamos qué nos depara el año que viene, y más que enfocarme en lo que ya pasó, me gustaría analizar con ustedes lo que sabemos que vendrá en el 2023.
Será un año de elecciones, más allá de que para quienes nos gusta la política es interesante ver cómo se desenvuelven las campañas, los candidatos sorpresa, etc., no es extraño que en estas épocas las promesas por decirlo menos soñadoras empiecen a rondar en el discurso nacional y vienen tanto de aquellos que ya se encuentran en el poder como los que lo están buscando.
Lo importante es obviar las promesas y enfocarnos en las credenciales de los candidatos (que no siempre son, y en muchos casos es mejor que no sean, políticas) y su concepto de ciudad o de provincia.
Por otro lado, los aires de recesión económica soplan cada vez con más fuerza, tanto por la guerra en Ucrania como por las medidas de la estrategia cero covid que provienen de China y afectan las cadenas globales de suministros. Los números de inflación a nivel mundial nos dan a entender que en el aspecto macroeconómico puede que la situación no cambie para bien.
La mejor forma de enfrentar una situación, que al menos por encima se ve adversa, es con un plan para un escenario difícil. En el caso del Gobierno es no confiar en el precio del petróleo, en el de los bananeros tomar en cuenta que el precio del banano pueda bajar, y así a lo largo del sector privado tanto en sus productos como en sus servicios.
Dicho todo esto, no es menos cierto que incluso en las crisis más duras aquellos que dan todo de sí para salir adelante encuentran la forma de progresar ya que es la resiliencia, la perseverancia y la disciplina las que nos empujan a superar cualquier obstáculo.
Finalmente, quiero desearles un excelente 2023, rodeados de quienes los quieren y haciendo el bien, los ecuatorianos hemos demostrado que sabemos trabajar y que ante las dificultades nos volvemos valientes, por eso más allá de lo que les comenté antes, tengo fe en que este será un gran año.