Premium

La lucha del gobierno de México contra el narcotráfico

Avatar del Juan Faidutti

La detención de Guzmán coincidió con de la llegada a México del presidente estadounidense Joe Biden.

Uno de los mayores fracasos del presidente López Obrador ha sido la lucha contra el narcotráfico, que está a punto de convertir a México en un narcoestado.

Lo que se logró con la extradición del Chapo Guzmán, uno de los más poderosos narcotraficantes del mundo, fue en el régimen anterior, en 2017, por encontrarse culpable de 10 cargos y una gran cantidad de asesinados.

El Chapo, quien llegó a ser el narco más buscado y célebre de México, fue extraditado a EE. UU. en 2017 y hallado culpable de los 10 cargos que enfrentaba, tras un juicio de tres meses que lo condenó a cadena perpetua. Está encerrado en una especie de jaula de hierro, controlado con un sistema sofisticado de alarmas.

En su vida privada tuvo 10 hijos, con tres mujeres distintas. Cuando fue detenido en 2016, cuatro de sus descendientes tomaron el control de gran parte del cartel de Sinaloa. Los cuatro chapitos, quienes heredaron de su padre un imperio que cuenta con al menos 5.000 hombres armados, controlan el negocio de la droga en las zonas norte y oeste de Sinaloa, y la totalidad de los estados de Nayarit, Chihuahua y Baja California Sur.

Fue un verdadero fiasco la liberación de Ovidio durante el primer intento de las autoridades mexicanas para detenerlo en 2019, cuando el gobierno ordenó su captura. Movilizaron al Ejército y a la Policía, pero este acto provocó bloqueos y enfrentamientos en todo Sinaloa, por lo que López Obrador tuvo que ordenar dar marcha atrás, pues los custodios del chapito Ovidio se encontraban mejor armados.

Guzmán, cuya detención fue posible, provocó violentos episodios de saqueo, dejando 10 soldados y 19 delincuentes muertos. Fue trasladado a Ciudad de México y después enviado al penal de máxima seguridad del Altiplano para comparecer ante las autoridades competentes.

En la conferencia no se informó sobre qué delitos se le imputan en México ni si sería extraditado a EE. UU., donde su padre, el Chapo, fue condenado en 2019 a cadena perpetua por narcotráfico. Aunque existe una solicitud de extradición por parte de Washington, un juez federal mexicano frenó por el momento cualquier intento de traslado al país vecino y ordenó que permanezca a disposición del juez, quien dictó prisión preventiva para Guzmán. Se teme que por la influencia que tienen los narcos en el poder Judicial se niegue su extradición.

La detención de Guzmán coincidió con de la llegada a México del presidente estadounidense Joe Biden, por la Cumbre de Líderes de América del Norte.