Premium

Leo Stagg: ¡Brillemos todos!

Avatar del Leo Stagg Stagg

La vida nos lanza retos constantemente, ya sea en el trabajo, en la familia, en la política o con la inseguridad

En los últimos días he conversado con amigos y conocidos que se sienten estresados, deprimidos o de mal genio. No les voy a mentir: hay días en los que me siento igual. La vida nos lanza retos constantemente, ya sea en el trabajo, en la familia, en la política o con la inseguridad que nos rodea. Esos problemas nos abruman y nos roban sonrisas. Personas que antes se caracterizaban por su alegría hoy parecen cargadas de tensiones y tristeza. Y aunque no siempre lo digamos, es normal sentirse así.

Vivimos en un mundo que avanza a mil por hora, lleno de información, expectativas y planes que no siempre se cumplen como queremos. Esto nos puede llevar a sentir miedo de probar cosas nuevas, vergüenza por no encontrar el trabajo que deseamos, falta de confianza para exigir un merecido reconocimiento, o culpa por errores del pasado. Pero quiero recordarles algo: la vida no es perfecta, y nosotros tampoco lo somos.

Sin embargo, aquí está lo maravilloso: cada día es una nueva oportunidad para empezar de nuevo.

Podemos reconciliarnos con nosotros mismos y decidir brillar, sin importar las circunstancias.

Les propongo un reto: enfoquémonos en las cosas bonitas que la vida nos regala. Aprendamos a valorar nuestros pequeños logros, porque ellos también cuentan. Digamos “te quiero” con más frecuencia, abracemos a quienes queremos, y pidamos perdón si hemos fallado.

Hasta lo que parece sencillo -levantarse de la cama, vestirse y salir a cumplir con nuestras responsabilidades- es un triunfo que merece ser reconocido.

Todos tenemos nuestra manera de brillar, y no hay un único camino para lograrlo. Tal vez sea a través de un trabajo bien hecho, de un proyecto completado, o de una sonrisa genuina que ofrecemos a los demás. Lo importante es que nos valoremos, nos aceptemos y sigamos adelante.

Este mensaje es para todos los que necesitan ese empujón para dar el siguiente paso. Porque, de una u otra forma, todos podemos brillar. Y el mundo necesita nuestra luz.