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Transición ecológica

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En resumen, ya varios cambios son irreversibles y si en la conferencia de Glasgow en dos meses no hay acciones, llegaremos al punto de no retorno’.

Era viernes 4 de junio. Vísperas de mi cumpleaños, fuimos a visitar a Gustavo Manrique, un apasionado en asuntos ambientales que había sido nombrado ministro de Ambiente. Lindo reto para alguien que sabe bien qué debemos hacer para consolidar esa potencia mundial ambiental que merecemos ser. Total, Dios ya se encargó de la peor parte, cómo armar ese rompecabezas y poner en un territorio tan pequeño, cinco pisos climáticos: cálido, templado, frío, páramo y glacial; cómo hacer para que la línea equinoccial ecuador cruzara su territorio, para que los rayos de luz cayeran perpendicularmente en abundancia; cómo hacer cruzar la cordillera de los Andes de norte a sur; cómo limitar el mar en su occidente y la selva amazónica en su oriente; cómo poner a las Galápagos a mil kilómetros de su costa, para luego ordenar a la vida en sus miles de modalidades, diviértanse y conviertan a ese lugar en el más megabiodiverso del planeta por kilómetro cuadrado.

Gustavo nos recibió con la noticia de que me tenía un regalo de cumpleaños. Al día siguiente, el presidente firmaría el cambio de nombre del ministerio a Ministerio de Ambiente, Agua y Transición Ecológica, en el mismo decreto que dispuso como prioridad nacional el desarrollo sostenible. Gran señal. Nuestro país así se convertía en el primer país en enfrentar políticamente las apremiantes necesidades de cambio en la forma de manejar nuestros recursos. Esos, los que Dios con tanta sabiduría puso a nuestro alcance.

Hoy, el grupo de expertos en cambio climático emitió su catastrófico reporte, de 3.500 páginas la extensa y de 35 páginas la versión para tomadores de decisiones. Vale la pena que revisen sus conclusiones, seguiremos hablando del tema. En resumen, ya varios cambios son irreversibles y si en la conferencia de Glasgow en dos meses no hay acciones, llegaremos al punto de no retorno. Ecuador hace su parte; solo un ejemplo: ¿cuántos países tienen una generación de energía con más del 90 % del recurso hídrico renovable? Por eso debemos alegrarnos de tener a un pragmático al mando de la nave llamada Ecuador y a un ministro que será capaz de impulsarnos a transitar hacia el equilibrio ambiental tan esperado. ¡Ecuador puede!