Narcodemocracia

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Presidenciables, no nos interesa saber si se van a alinear con Rusia, China, Venezuela, Cuba o Estados Unidos, la única soberanía que queremos ver es que nos saquen de las garras de las mafias.

Era el 2002 y había decidido conocer todas las áreas protegidas para conversar con los guardaparques sobre la realidad del sistema nacional. Nos tocaba visitar la reserva fronteriza El Ángel, a 10 kilómetros de Tulcán, un área maravillosa, fuente natural de agua de la zona norte. Mi edecán, el capitán Luis Morales, preocupado, redobló la seguridad de esa visita. Sobre territorio me mostraba los caminos que los narcos y terroristas usaban para entrar y salir de nuestro país.

Por eso no me sorprendí en el 2008 cuando se dio la operación Fénix o bombardeo de Angostura en territorio nacional, por las fuerzas armadas colombianas, dando muerte a Raúl Reyes y a 22 guerrilleros más de la FARC. Tampoco sorprendió la conclusión de la comisión ecuatoriana de notables de que “las FARC y el narcotráfico han logrado penetrar varias instancias de los organismos políticos, judiciales, culturales y sociales”, si total, ya el guerrillero Mono Jojoy había declarado en un video el aporte de las FARC a la campaña de su compañero Rafael. Tampoco sorprende que Rafael en pocos meses haya exigido el cierre de la base de Manta, que tuvo medio frenados a los narcos en nuestro terruño. Y así se abrió la puerta de par en par. Según los estudiosos hay 17 carteles de mafia actuantes en el Ecuador. Mafias de Albania, Rusia, China, Colombia, México, África, Italia y República Dominicana, lavan más de 3.500 millones de dólares anuales, contaminando caletas pesqueras, playas, fincas agrícolas, mineras, con penetración en gobiernos locales, policía, fuerzas armadas y lo peor de todo, a la justicia. El presidente Moreno dijo esta semana, “es que no podemos detener el flujo de droga hacia el Ecuador”.

Ya viene insistiendo Pancho Huerta desde hace más de once años en que el país estaba en peligro de convertirse en narcodemocracia gracias a que el correísmo mantuvo convivencia con el narcotráfico. Con esta realidad; ¿por qué no se le preguntó a los presidenciables qué harán? Presidenciables, no nos interesa saber si se van a alinear con Rusia, China, Venezuela, Cuba o Estados Unidos, la única soberanía que queremos ver es que nos saquen de las garras de las mafias.