Luis Sarrazín Dávila | Gracias presidente
Cerca de 15 especialistas diseñamos el proyecto de rehabilitación del INH
Gran alborozo produjo la alocución del señor presidente durante su visita al INSPI, la cual funcionó cual bálsamo frente a los anhelos de la clase médica, que luego de 13 años de lucha ha visto coronados sus esfuerzos al conocer su oferta de reapertura del Instituto Nacional de Higiene y Medicina Tropical Leopoldo Izquieta Pérez, al ofrecer la reanudación de la producción de productos biológicos y vacunas, así como la restitución de todas las funciones del INH que existían desde antes de su desaparición, gracias al malhadado decreto 1290, ilegal e inconstitucionalmente promulgado.
Para hacer efectiva su promesa se deberán cumplir ciertos pasos con miras a garantizar la legalidad de lo actuado y que son: derogación del Decreto 1290; restitución del INH, para lo cual se utilizarían unidades operativas, las que se denominarían Pabellón 1 del INH-ARCSA y Pabellón 2 del INH-INSPI; organización de la parte gerencial del INH, nombrando al director general, secretario general, administrador general, tesorero y jefe de Talento Humano para ir ingresando al personal que laborará cuando esté lista la infraestructura operativa. Se deberá nombrar a un profesional con experiencia para que coordine las acciones propias de esta rehabilitación.
Cerca de 15 especialistas diseñamos el proyecto de rehabilitación del INH que nos fue solicitado por el entonces vicepresidente Borrero, a quien se lo entregamos y que vilmente nos engañó al arrojarlo a los desechos y no ejecutarlo tal y como nos lo ofreció.
Este documento fue entregado por la Dra. Rosario Zambrano a la Dra. Anabella Azín y otro fue puesto en manos del señor presidente por parte del coronel Alberto Molina F. al asumir la presidencia.
La rehabilitación del INH, incorpora al campo de la salud a una de las más prestigiosas instituciones de talla nacional, regional y en ciertos aspectos hasta mundial, convirtiéndose en la atalaya de la salud del Ecuador, con un nivel de rentabilidad epidemiológica excelente, que nos permitió siempre estar en alerta frente a cualquier agresión de carácter epidémico o pandémico.
Y sigo andando…