Gangrena sanitaria II

Este mal que ha afectado a la casi totalidad de los establecimientos hospitalarios del Estado, ha orientado el daño a la falta de insumos y medicamentos, hecho que se relaciona directamente con el Sercop, institución putrefacta donde las mafias que son parte de ella, han convertido a la contratación pública en un verdadero pandemonio, paraíso de los filibusteros y traficantes que actúan con absoluta libertad. Adicionalmente, la corrupción ha campeado impunemente y por si fuera poco, existen daños a nivel de infraestructura que deben ser solucionados a la brevedad posible.
Por lo expuesto, creo firmemente que se requiere de manera mandatoria y selectiva, una declaración de emergencia a favor del hospital Teodoro Maldonado Carbo, con miras a que su actual gerente, con sobrada capacidad y méritos, pueda demostrar de lo que es capaz y oriente y canalice con todas la ejecutorias a su favor una adecuada recuperación.
Históricamente debemos aceptar que este tipo de declaratorias fueron como el maná, que permitió a sátrapas y vándalos hacer pingües negocios con la práctica de las contrataciones “a dedo” y sin control.
Existen ejemplos en la localidad, donde se ha demostrado hasta la saciedad que se pueden hacer compras de medicamento e insumos de calidad y a excelentes precios; por supuesto, cuando en aquellas transacciones lo que ha primado es el interés y conveniencia institucional y no el bolsillo de los intervinientes.
El doctor Francisco Andino, ha aceptado una gran responsabilidad y ha asumido un tremendo reto. Estamos seguros de que sabrá salir avante, siempre y cuando tenga a su haber los recursos financieros necesarios, así como todo el respaldo de las autoridades.
El vicepresidente ha propuesto un proyecto que consiste en externalizar la dispensación de medicamentos no hospitalarios, utilizando las farmacias instaladas en el país. Este proyecto fracasó en 1974 y me he permitido hacerle llegar los hechos de carácter negativo que se dieron en la época, para que pueda adoptar los correctivos en beneficio del éxito del mismo.
Y sigo andando…