Se van (II)
Y sigo andando…
Quienes ocupan cargos públicos deben tener la clarividencia para, mediante una autocrítica severa, reconocer si están preparados para ocuparlos y una vez en el ejercicio de estos, cumplir su cometido con criterio, capacidad gerencial y acrisolada honestidad, para lograr el reconocimiento de quienes fueron servidos, de quien lo nombró y de sí mismo, para gozar de la satisfacción del deber cumplido.
Su desempeño escribe la historia que se registra para futuras generaciones y es así que el vicepresidente, Dr. Alfredo Borrero, allá por mayo del 2021 convocó en sus oficinas ubicadas en el Gobierno del Litoral a varios profesionales para manifestarles que deseaba la reapertura del Instituto Nacional de Higiene y Medicina Tropical Leopoldo Izquieta Pérez, y que en virtud de su deseo, nos conminaba a desarrollar el proyecto respectivo, para lo cual puso a nuestra disposición al Dr. Eduardo Herdocia, quien se desempeñó muy profesionalmente.
El grupo escogido para desarrollarlo estuvo conformado por el Dr. Francisco Huerta (+), el Dr. Alfredo Palacio, el Dr. Francisco Andino, el Dr. Luiggi Martini, la Dra. Rosario Zambrano, la Dra. Aracelly Álava, la Dra. Elvira Marchán, el Dr. Hugo Jurado, el Dr. Eduardo Gómez, el Dr. Carlos Mosquera y yo.
De inmediato nos enfrascamos a trabajar intensamente, reuniéndonos dos y hasta tres veces por semana, y gracias a esta profunda e intensa dedicación logramos producir un documento valioso y de gran utilidad, pues se trató de un estudio integral para la reapertura del INH, que contenía un recuento histórico y una planificación legal, administrativa, operativa y financiera, que permitía de manera inmediata y práctica devolver la institucionalidad a tan noble como valiosa institución.
Jamás entenderemos cómo una autoridad y médico a la vez, sin el menor empacho, arrojó a la basura en septiembre, el trabajo que él mismo solicitó que realizáramos, demostrando una crueldad supina, con la que nos trató, burlándose con un placer morboso de los ‘monos’, a quienes olímpica y descaradamente tomó del pelo.
Y sigo andando…