La impunidad también es una bomba
"Defendemos la libertad de expresión porque la información pública es nuestra y debe ser reclamada"
La libertad de expresión es un derecho inherente al ser humano, no necesita de la concesión de ninguna persona, menos de una autoridad.
Poder expresarse no solo es base de la democracia sino parte de la relación dinámica y de confianza que debe existir entre el Estado y la ciudadanía.
Defendemos la libertad de expresión porque la información pública es nuestra y debe ser reclamada. Hay ocasiones en las que no solo se la exige en voz alta sino mediante una ruta legal y eficaz. En virtud de ello, el Ecuador, hace algunos años, expidió la Ley Orgánica de Acceso a la Información. Dicha ley incluye sanciones a quienes se nieguen entregar información, incluso a su destitución.
Todo servidor público tiene que realizar el esfuerzo suficiente para que los ciudadanos podamos saber todo, así lo dice la Constitución y la Declaración de Chapultepec que expresa: “Las autoridades deben estar legalmente obligadas a poner a disposición de los ciudadanos, en forma oportuna y equitativa, la información generada por el sector público. No podrá obligarse a ningún periodista a revelar sus fuentes de información”.
Por otro lado, todos tenemos derecho a opinar, incluso nuestra opinión no necesita ser brillante. Tenemos derecho a opinar sobre hechos y personas y nuestras opiniones están protegidas a pesar del disgusto con las que las reciban los funcionarios. Es decir, nuestro derecho a opinar es fuerte y garantizado.
Otra cosa es insultar, descalificar a la persona. Recuerdo tanto lo repudiables que fueron los insultos contra el expresidente Moreno por parte de ciertos indígenas en octubre del 2019. Y hablando de lo sucedido en ese mes, ¿qué se ha hecho para identificar a los responsables de los delitos cometidos ese día? De ello se sabe muy poco y la Fiscalía General, sobre eso, nos debe mucho.
Ni la impunidad ni los insultos, de ningún lado. Lástima que esto aún no está claro, que siga siendo tema no resuelto, en lugar de resolver cosas tan injustas como los niños que son “alquilados” para mendigar en las calles o ¿acaso la violencia en todas sus formas se hizo permisible?