Martín Pallares | Pabel Muñoz es un superhéroe
Ahí donde otros ven una tragedia, Muñoz y sus palafreneros vieron una oportunidad
El alcalde de Quito y sus palafreneros actúan como casi todos los políticos ecuatorianos: en cada tragedia encuentran una excelente oportunidad para cosechar votos. Cuando hubo el deslave en el sector de La Gasca, tan pronto como se aseguró que una cámara lo seguía, Pabel Muñoz se puso botas de caucho y fue al lodazal a repartir abrazos y cobijas a los damnificados. Ahora que los bosques aledaños a Quito se incendiaron, Muñoz se aseguró de poner en sus cuentas de redes sociales un video en el que no tuvo empacho de aparecer como si se tratara de un superhéroe que, poniendo su vida en riesgo por el fuego que lo rodea, es capaz de dirigir la operación que salvará a los quiteños. “¡Hay que poner una línea aquí!”, se le escucha decir como si fuera un experto y segundos más tarde se lo ve repartiendo abrazos a quienes ven en él al salvador. Muñoz, en el video, es el único actor principal de una película epopéyica y todos cuantos lo rodean son apenas actores de reparto. Sin embargo, el título de video que él mismo creó y que luego sus palafreneros convirtieron en etiqueta para redes sociales decía, sin aspavientos ni remilgos, “Todos somos Quito”. Claro, un #TodosSomosQuito con un solo rostro: el de Muñoz. Está claro que los estrategas de comunicación política de la Alcaldía lo que querían es que Muñoz sea el rostro de ese espíritu de lucha y solidaridad que brotó la tarde y noche del siniestro. Ahí donde otros ven una tragedia, Muñoz y sus palafreneros vieron una oportunidad.
Los productores del video se encargaron, además, de que las escenas sean lo más asépticas posibles: los damnificados aparecen como desvalidas criaturas que salen de las sombras únicamente para buscar los acogedores abrazos del superhéroe. Nunca se ve una casa destruida, nunca una persona con quemaduras, nunca una madre llorando o una familia que ha perdido todo lo suyo; en las historias de los superhéroes solo hay agradecidos, nunca víctimas letales.
No hay cómo acusar a Muñoz de ser el único en tratar de cosechar aplausos y votos en medio de la desolación. El presidente Daniel Noboa hizo un video con escenas del deslave en La Gasca (quizá no alcanzó a ir al incendio) y Jan Topic tampoco perdió la oportunidad de estar en Guápulo. La pregunta es, sin embargo, ¿por qué al superhéroe no se le ocurrió poner hidrantes en las zonas donde los bosques de eucalipto acarician la ciudad?
