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Mauricio Velandia: Cartelización política

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Pues bien, todo este escenario de infracciones de derecho de la competencia en el mercado, ahora se ve en materia política

Las normas son necesarias en una sociedad democrática. En el mundo de los negocios existe una regulación para proteger al consumidor de comportamientos que puedan afectar su billetera, su libertad en el mercado y su posibilidad de elección. En materia política esta regulación de cuidado no existe, es solo para el comercio. Pero gran parte de las infracciones comerciales se están presentando de forma análoga en la arena política. Veamos.

En el derecho de los mercados se encuentran infracciones como los carteles, el abuso de la posición de dominio, las integraciones empresariales monopólicas y las ayudas estatales anticompetitivas.

Un cartel se presenta cuando dos o más empresas orquestan su comportamiento para sacar a alguien del mercado o para evitar su competencia por la clientela. El abuso de poder de mercado se da cuando existe un agente con gran primacía en el mercado, que se la ha ganado en competencia, pero algunos, en virtud de dicha primacía, desarrollan conductas para expulsar a sus competidores del mercado.

Las integraciones empresariales monopólicas llegan cuando una empresa compra a sus competidores aumentando participación de mercado no bajo competencia pura, sino con fajos de compras, lo que conlleva a la generación de monopolios.

Por último está el tema de las ayudas estatales anticompetitivas, cuando es el propio Estado quien, bajo comportamientos regulatorios activos o comportamientos omisivos regulatorios, quien brinda una protección con manto de la regulación y no de la competencia.

La aplicación del derecho de la competencia lo que persigue es la eficiencia y que los precios sean producto de ese enfrentamiento entre oferta y demanda, para que en un mercado relevante existan sustitutos. Este punto de sustitutos es de la mayor importancia.

En Europa la defensa de la competencia tiene historia. En época de la II Guerra Mundial, Alemania propició la cartelización de empresas alemanas para unir a los empresarios a su bando. En la posguerra Francia consideró que la lucha contra las grandes empresas era una forma de promover sus intereses económicos nacionales. Después nació la Comisión Europea, en Bruselas, donde son usuales las investigaciones regulatorias sobre los gigantes tecnológicos estadounidenses, entre ellos Apple, Google y Meta. El 17 de septiembre fue nombrada Teresa Ribera como comisaria de competencia en la Unión Europea. Viene con agenda propia: (i) enfrentar las llamadas adquisiciones asesinas, en las que una empresa grande y dominante compra a un competidor más pequeño, más innovador, y lo acaba. (ii) pregonar la defensa de la innovación, bajo la cual se busca la creatividad; (iii) poner el foco en objetivos geopolíticos, dependiendo menos de la buena voluntad de otros gobiernos y evitar verse influidos por políticas en otros lugares, es decir, que los subsidios extranjeros no inclinen el campo de juego en contra ellos.

Pues bien, todo este escenario de infracciones de derecho de la competencia en el mercado, en mi opinión, ahora se ve en materia política: (i) carteles entre políticos para excluir de la contienda a otros; (ii) abusos de quienes están en el poder para quedarse y excluir de la contienda a los que puedan brindar otra alternativa, rodeándose de quienes les dan seguridad de continuidad prometiendo ayudas estatales; (iii) integraciones entre empresarios consentidos por el gobernante, integrando negocios-votos o justicia- política.

Vienen las elecciones y con ellas, la cartelización política.