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Medardo Mora: Elección polarizada

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El Ecuador acudirá a otra elección sin mayor emoción cívica, con muchas preocupaciones, escasas esperanzas

El Ecuador acudirá a otra elección sin mayor emoción cívica, con muchas preocupaciones, escasas esperanzas y una marcada radicalización política. La contienda electoral ha dejado de ser entre tesis doctrinarias y propuestas fundamentadas para solucionar los complejos problemas que aquejan al país, está limitada a escoger entre vivir en democracia, en libertad, con muchas insatisfacciones y carencias, u optar por un régimen estatista, autoritario y sectario, como en Venezuela, que irrespeta los derechos humanos, que ha sumergido a la población en la miseria y provocado la migración de millones de desplazados.

La polarización conspira contra la posibilidad de acuerdos sobre objetivos nacionales por un futuro más estable y esperanzador. El expresidente Osvaldo Hurtado en declaraciones a Diario EXPRESO, con su experiencia y conocimientos de la realidad del país, advirtió que se acudirá a votar no por el mejor ni menos malo de los candidatos; se decidirá por la disyuntiva existente.

La clase política se encuentra disfrutando de la campaña electoral, en la que es experta, pagada por los ciudadanos, realizando propuestas salameras, mentirosas, histriónicas. Conseguido el voto olvidan promesas y reivindicando una representación ciudadana buscan acomodos personales o de su grupo. Se extraña las antiguas confrontaciones sobre los intereses del país, como las que hubo desde los años 50 a los 70 entre el Frente Democrático y el Velasquismo, en la restauración democrática en 1979 entre los entonces jóvenes Roldós y Hurtado, abanderados del cambio, con los experimentados Raúl Clemente Huerta y Sixto Duran Ballén, a quienes se identificaba con la vieja política. Posteriormente entre la Izquierda Democrática liderada por Rodrigo Borja y el socialcristianismo liderado por León Febres-Cordero, quien hasta su muerte a inicios del gobierno de Rafael Correa tuvo un decisorio protagonismo político.

Al parecer se repetirá la segunda vuelta electoral de 2023 entre Daniel Noboa y Luisa González, el crecimiento posdebate de la candidata Andrea González difícilmente llegará al porcentaje de los dos favoritos.