Modesto Apolo: Lección de vida
Pusieron manos a la obra y nos regalaron sus triunfos, ese es un ejemplo a seguir y una gran lección de vida
A los ecuatorianos los gobiernos paternalistas nos convencieron de que el Estado tiene que darnos todo gratis para vivir bien. El resultado ha sido lo opuesto; población empobrecida carente de lo fundamental, y los gobiernos populistas, paternalistas corruptos.
John F. Kennedy, presidente 35 de los Estados Unidos, en 1962, al tomar posesión de su mandato, en su discurso manifestó: “No preguntes qué puede hacer América por ti, pregúntate qué puedes hacer tú por América…”, rompiendo así las cadenas del paternalismo, liberando a la población americana, de la mentalidad de mendigos. El resultado es innegable; el que se dedica con tesón y disciplina a trabajar, triunfa en EE.UU., la tierra de las oportunidades.
En Ecuador, un niño ambateño se trasladó a Guayaquil buscando progresar económicamente, vendió lotería, periódicos, emprendió en negocios y fue el hombre que levantó la fortuna más grande del Ecuador; hoy su nieto es presidente de la República.
En el Carchi, un padre le regala a su hijo una bicicleta que había tomado de un botadero; al cabo de los años fue campeón de ciclismo en varios eventos internacionales.
Una imbabureña en el mundial Sub 18 de atletismo en Kenia en 2017, ganó medalla de oro participando con zapatos con agujeros en la suela.
Los cuencanos Rolando Vera, cuatro veces campeón de San Silvestre, y Jefferson Pérez y Daniel Pintado, campeones de atletismo y marcha.
Las esmeraldeñas Neisi Dajomes y Angie Palacios, campeonas olímpicas en halterofilia.
La niña de Mocache, Lucía Yépez, a sus 23 años, medalla de plata en lucha en las Olimpiadas de París.
Si nos preguntamos, ¿qué tienen los nombrados en común? En resumen, tomaron su destino en sus propias manos, vinieron de estrato económico bajo, carecieron de ayuda estatal, vencieron cuanto obstáculo se les presentó y con tesón, disciplina y esfuerzo, alcanzaron el triunfo. Ellos no se preguntaron qué podía hacer el Ecuador por ellos, se preguntaron: ¿qué podían hacer ellos por sí mismos y por el Ecuador? Pusieron manos a la obra y nos regalaron sus triunfos, ese es un ejemplo a seguir y una gran lección de vida.
