Modesto Gerardo Apolo | Apoyo a invasión es corrupción
Y sólo un estúpido o corrupto podría apoyar la corrupción y el delito
El sicariato cometido en el km 5 de la vía a Daule, en el patio de estacionamiento del Teatro Centro de Arte, en la ciudad de Guayaquil, ha puesto en la palestra el negociado de las invasiones y el capital político que esto significa para algunos políticos y/o sus movimientos o partidos que, abierta o solapadamente, apoyan esta actividad delincuencial que representa explotación y aprovechamiento de la necesidad de los más vulnerables, por tanto, los más pobres.
Las invasiones siempre han sido delito, al igual que herramienta de delincuentes dedicados a dicha repudiable práctica. Muchos de ellos cuentan con el apoyo de algún político corrupto, que cual rémora, aprovechándose de la actividad del delincuente promotor de invasiones explota políticamente la necesidad ajena, fundamenta su plataforma política en la supuesta solución de los problemas y necesidades de esa comunidad estafada y explotada por el invasor promotor, quien cobra valores excesivos por proporcionar servicios pirateados, tales como agua y electricidad, enriqueciéndose con la ‘venta’ de tierras que no le pertenecen, y con servicios que tampoco le pertenecen. A más de ello, obtiene prebendas y protección política, siendo en algunos casos apadrinados para acceder a alguna concejalía, o a algún puesto en la Asamblea.
Tal es el negocio que generan las invasiones, que cuando estas son combatidas, los delincuentes promotores invasores ordenan a sicarios terminar con la vida del propietario real, que interrumpió o desalojó la invasión.
Tal es el caso del sicariato cometido en el km 5 de la vía a Daule, en el interior del parqueadero del Teatro Centro de Arte.
Este es otro elemento a tener en cuenta a la hora de analizar las candidaturas y los movimientos o partidos políticos que apoyan tales candidaturas; ya que si la tienda política apoya o se aprovecha de manera directa o indirecta de las invasiones, o candidatiza a un promotor de invasiones, dicha tienda política es corrupta al aprovecharse de un delito y apoyar a un delincuente.
Y sólo un estúpido o corrupto podría apoyar la corrupción y el delito.
