Modesto Apolo: La plaga terrorista
En lo político podemos citar el reciente ataque del grupo terrorista Hamás contra el pueblo de Israel
Se denomina terrorismo al uso metódico del horror o pánico perpetrado por múltiples organizaciones, grupos, carteles y/o individuos en la promoción o consecución de sus objetivos, sean estos políticos, religiosos o delincuenciales.
En el plano nacional, con el surgimiento del grupo terrorista Alfaro Vive Carajo que pretendió imponer la ideología socialista en la década de los ochenta, el Presidente León Febres-Cordero (LFC) los combatió sin tregua, permitiéndonos por algunas décadas ser una isla de paz entre dos vecinos infestados de la plaga terrorista de las FARC, en Colombia; del MRTA y Sendero Luminoso en Perú.
En el plano internacional, como ejemplo de terrorismo religioso tenemos el ataque de Al Qaeda contra el World Trade Center el 11 de septiembre del 2001, acontecimiento que en cuanto a la seguridad marcó un antes y un después. La reacción de la comunidad internacional fue repudiar los atentados y la del gobierno de EE. UU. iniciar una campaña militar hasta eliminar a la facción terrorista responsable.
En lo político podemos citar el reciente ataque del grupo terrorista Hamás contra el pueblo de Israel. Al igual que en el caso anterior, el repudio de la comunidad internacional contra el ataque terrorista ha sido contundente y la reacción del gobierno Israelí, en lo militar, ha sido ejemplarizadora.
La lección que los casos descritos nos revela es que con el terrorismo no se pacta, no se negocia; se lo debe exterminar, porque caso contrario se reproduce, muta, infestando el tejido social, sin importar si son hombres, mujeres o niños, para quienes los derechos humanos son inexistentes por ser considerados un recurso más en la lucha para lograr sus objetivos.
El narcoterrorismo, al igual que el terrorismo político y el terrorismo de las organizaciones criminales son verdaderas plagas para la sociedad, por lo que deberían tener igual tratamiento que el aplicado por los gobiernos norteamericano, israelita y el de LFC, esto es, cero tolerancia; ningún trato o acuerdo, solo su extinción. Solo aniquilando la plaga terrorista lograremos dejar de ser un narcoestado.
