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El golpe

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Los frenéticos del golpismo olvidan que de las investigaciones y juicios planteados en Colombia contra los narcoguerrilleros de las FARC

La oposición pretendió imputar al presidente Lasso el cometimiento del delito de traición a la patria, delitos contra la seguridad del Estado, responsabilidad por omisión; etc. Al leer los supuestos delitos, tratándose de los integrantes correístas de la comisión me preguntaba: ¿es la confesión de lo que sucedió en el gobierno de la revolución ciudadana, o en verdad de acusaciones, bajo supuestos, contra el presidente Lasso? Si tales supuestos no comprobados serían suficientes para destituir al presidente Lasso, también deberían ser para impedir a un ciudadano o expresidente que haya estado en similar situación, participar ni ser electo a ningún cargo público a futuro.

Los frenéticos del golpismo olvidan que de las investigaciones y juicios planteados en Colombia contra los narcoguerrilleros de las FARC, del contenido de las computadoras y discos duros de alias Mono Jojoi y alias Raúl Reyes, se determinó que en la primera campaña presidencial de Correa, Alianza PAIS recibió medio millón de dólares de las FARC. Si en dicho caso, con información confirmada no fue causal de juicio político contra Correa, tampoco existiría causal bajo supuestos no comprobados para enjuiciar políticamente al presidente Lasso.

¡Qué mayor violación a la soberanía que haber permitido al guerrillero colombiano, alias Raúl Reyes, instalar su campamento en Angostura, Sucumbíos, Ecuador! Si eso no fue causa para enjuiciar a Correa, el argumento contra Lasso pierde sustento.

¡Qué mayor atentado contra la seguridad del Estado, que poner a un aliado a la narcoguerrilla de las FARC, a José Ignacio Chauvín, alias Guacho, como viceministro de Gobierno!, quien fue descubierto cedulando como ecuatorianos a guerrilleros colombianos.

Si ninguno de los hechos descritos, cometidos durante el gobierno de Rafael Correa, fueron considerados causales para enjuiciarlo políticamente, por analogía, en el hipotético no consentido de que existieran tales supuestos en referencia al presidente Lasso, tampoco habría causal para el juicio político en su contra.

Si lo relatado fuese una obra teatral, se llamaría El golpe.