Paúl Palacios: El modelo de Maduro
Maduro es un experto, como todos los dictadores, en ganar tiempo, tontear y ganar por el agotamiento de la oposición
Silvio de Franco fue un prestigioso profesor de Incae en Gestión Pública, y en sus clases indicaba que los gobernantes tienen tres modelos de interacción y toma de decisiones con la sociedad y los grupos de interés.
El primer modelo, a veces el menos frecuente, es un modelo racional. En este modelo el proceso de toma de decisiones se basa en la búsqueda técnica de eficiencia y del mejor interés público.
El segundo modelo es el de cabildeo. En él, las partes ofrecen algo para recibir algo. No necesariamente es un tema de corrupción, aunque también lo es en muchos casos. Se trata del típico proceso de negociación con sectores sociales, sectores económicos, o aspectos a veces no santos de agentes gubernamentales.
El tercer modelo es el ‘cibernético’. Este modelo, para hacer una analogía, funciona como un acondicionador de aire; cuando sube la temperatura se activa y busca bajarla, hasta que esta ha bajado lo suficiente y se desactiva.
Este es el modelo que usa Maduro, y en general los gobiernos autoritarios cuando no tienen de su lado a la población o a los sectores externos.
Cuando la oposición hace reclamos, sale a la calle, presiona y Maduro ‘llama al diálogo’; crea una comisión, hace que la oposición se siente a dialogar, logra acuerdos, baja la temperatura, y no los cumple nunca.
Cuando los actores internacionales empiezan a presionar, Maduro enciende el modelo, llama al diálogo, se consigue interlocutores para que sienten a dialogar a los que presionan, logra sentarlos, se hacen acuerdos, el mundo se levanta feliz, y bajó la temperatura.
Siempre volverá a incumplir los acuerdos.
Siempre se encuentra los tontos funcionales internacionales y los vivos locales con su propia agenda para lavarle la cara a cuenta del diálogo.
Para ejemplo los Acuerdos de Barbados, y como ese ejemplo, muchos.
María Corina Machado es la única histórica líder de la oposición que jamás de comió el cuento del ‘modelo cibernético’, porque sabía que nada es menos valioso que la palabra de un dictador.
La oposición ganó limpiamente, si negocian hoy con Maduro se les reirá de nuevo.