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Esa Asamblea

Avatar del Roberto López

"La Asamblea pretende censurar a la ministra de Gobierno. A quien evitó el derramamiento de sangre que un desquiciado por el poder intentó provocar"

Si hay algo cierto en los hechos acaecidos durante la debacle del octubre negro, es que nada de lo que sucedió fue casual. Todo obedeció a una estricta planificación. Como bien ha afirmado la ministra de Gobierno, no se trató de ninguna protesta social.

Al contrario, fue un intento de golpe de Estado. Su objetivo era derrocar al Gobierno. Porque -dejémonos de remilgos y digamos la verdad- todos sabemos quién estaba detrás de este intento. Quien no parece encontrar mejor oficio en la vida que el de ejercer como dictador y “venir por más”, como si fuera poco lo que llevó. Ese que no encuentra paz en su lejano ático, hasta que no regrese a seguir disfrutando de las delicias de un poder que solo es capaz de concebir como suyo propio.

Por eso incendiaron la Contraloría, se tomaron la Asamblea, destruyeron el Centro Histórico de Quito, cerraron vías públicas y carreteras y secuestraron periodistas, policías y militares. Atacaron con explosivos un cuartel policial, se tomaron los pozos petroleros al grito de “cierren las llaves”, porque supuestamente pertenecen a alguien que los percibe como suyos, y no a la República del Ecuador.

Lo increíble es que semejante descalabro haya podido ser manejado de tal forma que se lograra impedir lo que el roedor belga -sin importarle la pérdida de las vidas de sus coterráneos- intentó provocar: una masacre de tal magnitud, que ocasionara la caída del régimen. Y quien impidió que lo consiguiera fue la ministra de Gobierno, con su manejo impecable de la crisis. No se lo perdona. De ahí que sea él quien está detrás de los que ahora quieren su cabeza, sin darse cuenta de que -tontamente- solo le hacen el juego.

La Asamblea pretende censurar a la ministra de Gobierno. A quien evitó el derramamiento de sangre que un desquiciado por el poder intentó provocar. La misma Asamblea que no aprueba la Ley de Extinción de Dominio, la que impidió el juicio de la mejor presidente del CNE de la historia, la que perdonó al compadre lindo, maneniéndole su inmunidad y que tiene 60 investigados por -que se yo- cuantas trafasías.

Esa. Esa Asamblea.