Educación sesgada y adoctrinadora

El objetivo es suministrarle herramientas y conocimientos esenciales para que en la vida cotidiana el sujeto aprenda y funcione de manera flexible
Se conoce como educación al proceso por el que la sociedad imparte a las personas instrucción y capacitación metodológica en práctica y conocimientos, durante toda la vida, formándola y potenciando el crecimiento de sus destrezas, aptitudes y competencias personales y profesionales. El objetivo es suministrarle herramientas y conocimientos esenciales para que en la vida cotidiana el sujeto aprenda y funcione de manera flexible, incluyente, eficaz y eficiente.
La formación de la persona, estará destinada a desarrollar la capacidad intelectual, moral y afectiva, de acuerdo con la cultura y las normas de convivencia de la sociedad a la que pertenece, impulsando la educación en valores, principios, buenas costumbres, ética y demás criterios, para la formación integral del individuo y su desenvolvimiento social.
Las autoridades, instructor o profesor, no deben influir transmitiendo o adoctrinando a los alumnos o personas con sus criterios ideológicos o políticos partidistas, haciendo de la sociedad un caldo de cultivo para los intereses de grupos. La educación no debe ser sesgada ni adoctrinadora en ideologías. Son las personas quienes, a la mayoría de edad, con plena consciencia y discernimiento total, podrían escoger la ideología, preferencias y demás características selectivas, dentro de sus derechos individuales.
Es lamentable verificar cómo en América Latina, desde la aparición del Foro de Sao Paulo en 1990 y en Europa antes, el adoctrinamiento en las escuelas y colegios se ha acentuado implementando la guerra de ideas que auspicia la lucha de clases y resentimiento social por parte de grupos que se autodenominan progresistas, de ideología izquierdista, a la que han sumado la ideología de género, el irrespeto, irreverencia, confrontación y anarquismo; atacando a los principales valores de la sociedad, entre ellos la familia natural, para destruirla y lograr así el cambio social según su ideología de género, la que no corresponde a la ideología de una normal generación actual, sino que se trata de una ideóloga degenerada, base de los actuales problemas.