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Rosa Torres | ¿Atomización planificada?

Avatar del Rosa Torres Gorostiza

La atomización de candidatos siempre beneficia a los que tienen una maquinaria electoral que sobrepasa al proyecto político

Con la  estrategia de “divide y vencerás”, que indistintamente emplearon los emperadores Julio César (romano) y Napoleón Bonaparte (francés) en sus imperios, creo que el correísmo intentará quedarse con el poder en las próximas elecciones presidenciales.

Basta con ver el tablero de los 17 posibles binomios presidenciales, que tienen plazo hasta el 2 de octubre para legalizar sus candidaturas, para creer que todo está calculado para que una atomización permita dividir tanto el voto de los ecuatorianos, que la aspirante de la Revolución Ciudadana, Luisa González, logre reeditar el resultado de los comicios del 2023, con un paso asegurado a la segunda vuelta. Y a partir de allí, lograr las alianzas necesarias para ganar la segunda vuelta.

Vale recordar que las experiencias pasadas han mostrado que la atomización siempre beneficia a los que tienen una maquinaria electoral que sobrepasa al proyecto político. Y el correísmo no solo tiene esto sino también un caudal electoral propio (voto cautivo).

En el pasado, el Centro Democrático de Jimmy Jairala se alió con la Alianza País de Rafael Correa para ganar las elecciones. ¿Y quién es el precandidato de esa agrupación política? Nada más y nada menos que José Serrano, uno de los exministros y hombre de confianza del expresidente de la República.

Otro candidato que resalta en disgregación es el de Pueblo Igualdad y Democracia (lista 4), el general Víctor Araúz, mencionado en el caso Encuentro, pero que ha negado haber tenido conversaciones con el exmandatario para ser candidato presidencial. En la política ecuatoriana todo es posible, porque la falta de honestidad está en primera fila.

El tercer aspirante presidencial, que podría ser parte de la estrategia, es Carlos Rabascall. No hay que olvidar que él fue el candidato del correísmo a vicepresidente de la República en las elecciones del 2021. El hecho de que políticamente haya mostrado un distanciamiento con Correa, no quiere decir que realmente aquello haya ocurrido.

¿Y dónde queda el dirigente indígena Leonidas Iza? Él también aspira a estar en la papeleta electoral por Pachakutik. Habrá que esperar la confirmación de los candidatos para saber cuántos quedan. Porque 17 binomios es una barbaridad. Y una atomización bien planificada.