Sophia Forneris | El innombrable problema de todo gobierno: Salud
Debemos recordar que el problema de salud pública en este país es preocupante
Hace algunos días, Diario Expreso realizó un recorrido por los rangos de precios para procedimientos médicos en la ciudad de Guayaquil, el problema creo que no sorprende a nadie. Aunque la observación es buena creo que al final no nos estamos enfocando verdaderamente en lo que importa cuando hablamos de servicios de salud, que es calidad de servicio específicamente en atenciones primarias.
Para la Organización Mundial de la Salud los objetivos de Salud Pública solo pueden lograrse dentro de un sistema de salud altamente funcional con una prestación de atención primaria eficaz.
Un sistema de Salud Pública sin capacidades sólidas de atención primaria carece de la capacidad para detectar casos iniciales de un brote, asímismo, carece de la habilidad de derivar otros servicios médicos cuando algo es detectado empeorando la calidad de vida del paciente. Esto finalmente crea una cadena de necesidades que los servicios médicos actuales no pueden suplir.
Las agencias gubernamentales son la piedra angular del sistema de salud de un país, pero no pueden trabajar de forma aislada. En la actualidad, en nuestro país las instituciones publicas médicas no tienen la infraestructura ni el financiamiento para dar atenciones de calidad en un tiempo eficaz.
Para brindar una respuesta adecuada deben crear y mantener asociaciones con otras instituciones privados especificamente sin fines de lucro para así lograr una estrecha colaboración con las comunidades y las organizaciones regionales.
Debemos recordar que el problema de salud pública en este país es preocupante y este gobierno, como los anteriores, se ha mantenido tibio a los casos de corrupción en el sector de salud publica sin un plan coherente para atender las necesidades de sus ciudadanos.
Sin embargo, puede ser extremadamente difícil generar confianza cuando prevalece la corrupción en todo el sistema de salud publica.
Cuando los sistemas de salud de un país son débiles y la gente cuestiona los motivos que sustentan los mensajes que promueven, la confianza del público en el trabajo del gobierno tiende a ser mínima o inexistente. Por lo tanto, es vital que se tome un tiempo para escuchar a los ciudadanos que utilizan estos servicios y se los considere cuando el gobierno decida implementar cambios en el sistema de salud pública.