Editorial: Bañar de ‘sanidad’ al IESS
Los postulantes a Carondelet deberían tomar en cuenta el malestar que hoy existe por la atención no brindada
Los cambios que requiere la seguridad social se han venido dando a cuentagotas, pero hasta ahora esto no ha significado ninguna transformación contundente para decir que el futuro del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) es realmente sostenible y representa una vía alterna y eficaz de servicio de salud para sus afiliados. En un nuevo año, y con la llegada de un nuevo gobierno, debería ser preponderante ‘bañar de sanidad’ a esta institución.
No existe hasta ahora ninguna garantía de haber terminado con las mafias que por años han venido haciendo negocios con la seguridad social, sacando provecho con contratos amañados y con sobreprecios que no hacen otra cosa que alejar al afiliado de ejercer su derecho a la salud que debe recibir como retribución a los años de aporte que ha hecho en toda su vida laboral. Los ecuatorianos necesitan escuchar propuestas reales de cambio, que den garantía de un saneamiento real de la entidad. Los postulantes a Carondelet deberían tomar en cuenta el malestar que hoy existe por la atención no brindada, no es posible que el sistema tenga que asumir medicamentos costosos, que en otros países se ofrecen por un valor hasta 10 veces menor. No revertir esta realidad es abonar más a la debilidad de esta institución, cada vez con menos contribuyentes.