Editorial | La burbuja de paz y tranquilidad

El Gobierno Nacional vive encerrado en la burbuja de los videos de TikTok e Instagram

El Gobierno describe un país muy diferente al que se percibe en la calle. Es cierto que no se han registrado matanzas carcelarias en los últimos meses, pero continúan las extorsiones, secuestros, sicariatos y asaltos por doquier. El presidente debe estar viviendo en un Ecuador paralelo, porque en este no hay ni paz ni tranquilidad; lo que reina es el miedo.

Obviamente, en la alta esfera política tampoco se sienten la paz y tranquilidad de las que habla el mandatario, porque si así fuese, el presidente y varios ministros no se movilizarían fuertemente resguardados por militares y policías, y en carros blindados (algunos hasta sin placas). Si tanto éxito tienen con el plan Fénix, que ya inició su segunda fase (¿cuál habrá sido la primera?), por qué no reducen sus custodias y se trasladan como el común de los ecuatorianos, sin ningún tipo de protección, más que la plegaria al Dios en el que creen?

Las autoridades del Gobierno Nacional deben salir de la burbuja de los videos de TikTok e Instagram para que palpen la realidad de las calles en las que siguen secuestrando, asesinando y extorsionando al pueblo. No hay pompa que no explote y, cuando aquello ocurra, los funcionarios que sostuvieron ese panorama idílico de paz y tranquilidad tendrán que rendir cuentas a los ciudadanos.