Editorial: La crisis vial, otro pendiente urgente

Reconstruir la vialidad potenciará al sector exportador, al comercio, al turismo, que requieren vías en buen estado

En época de crisis energética, los esfuerzos se concentran en cómo adecuar el mercado para que inversiones privadas puedan arribar y amortiguar las consecuencias de los apagones, a corto y largo plazo. Pero Ecuador, un país aún desprovisto de muchos servicios básicos, enfrenta también otros tipos de crisis, como la vial, cuya solución debe estar en la lista de prioridades. El actual Gobierno, que ha empezado a entender que un Estado sin recursos y con problemas institucionales es un actor inválido para promover cambios que requieren de capitales, debe apostar por concesionar carreteras claves que aporten al dinamismo económico, no solo dando empleo con su reconstrucción o mejoramiento, sino contribuyendo a la conectividad que pide a gritos el sector productivo. ¿Cuánto tiempo más demorarán en licitar vías como las que conducen a Machala o a Quevedo?

Este tema también debe empezar a considerarse como algo urgente. Si bien por el efecto devastador de los apagones solucionar la crisis energética tiene prioridad sobre otros problemas, el tener carreteras en mal estado e inseguras genera atraso y millonarias pérdidas a un país que está en la cola en cuanto a competitividad.

Reconstruir la vialidad potenciará al sector exportador, al comercio, al turismo, que requieren vías en buen estado para su óptimo desenvolvimiento y progreso.