Editorial | Motos: creciente problema sin control
El cada vez mayor número de motos que circulan por las calles está contribuyendo significativamente a caotizar más el tráfico
En Quito, en Guayaquil y en las demás ciudades del país, el cada vez mayor número de motos que circulan por sus calles está contribuyendo significativamente a caotizar más el tráfico. Pese a ello no ha habido -que se conozca- iniciativas de las autoridades de tránsito para implementar medidas que permitan encauzar su circulación y realizar controles. Los motociclistas ruedan por donde se les ocurre. Si están copados los carriles se inventan uno o avanzan zigzagueando entre los autos. No miden el peligro y se lanzan. Si un conductor de auto gira y no alcanza a ver al motociclista que imprudentemente se incorpora a la vía, es muy probable que ocurra un accidente. Igual sucede cuando un auto está detenido en un semáforo; ni bien cambia la luz a verde, de ambos costados aparecen repentinamente motociclistas que no dan tiempo a reaccionar al conductor del vehículo. Caso aparte son los repartidores a domicilio, que hacen piruetas en el tráfico para llegar puntuales, cruzando incluso en contravía, sin reparar en que podría costarles la vida.
Las motos deben avanzar por un solo carril, no cruzando de uno a otro. Para evitar tragedias y contratiempos a motociclistas y a quienes conducen autos, se debe controlar que se cumplan estrictamente las normativas vigentes y crear aquellas que suplan los vacíos existentes en función de la realidad actual para así garantizar un tránsito seguro.