Editorial: No más recursos para financiar circos
Parte de los escasos recursos del país se destinan a mantener entes cuya permanencia está totalmente cuestionada
La situación deficitaria de Ecuador debería manejarse como se hace a nivel micro, en empresas y hogares, priorizando el gasto imprescindible para la subsistencia y bienestar de quienes los integran. Sin embargo, parte de los escasos recursos del país se destinan a mantener entes cuya permanencia está totalmente cuestionada debido a la ineficiencia y corrupción que imperan en ellos; mientras que otra parte significativa financia rubros insostenibles, como subsidios que alientan el contrabando o fondos para que candidatos hagan campaña electoral, aun sin tener la menor probabilidad de ganar. Es penoso ver cómo se dilapida el dinero de los contribuyentes ecuatorianos en organismos como el CPCCS, el Consejo de la Judicatura y la Asamblea Nacional, donde lejos de darse actuaciones lúcidas, justas, responsables y patrióticas, que defiendan los intereses de la población, su progreso y desarrollo, solo se observan espectáculos deplorables y vergonzosos; o la pérdida de miles de millones de dólares que escapan por las fronteras a través de combustibles subsidiados.
Es necesario hacer cambios concretos y efectivos en el marco legal vigente y en la estructura del Estado. Los recursos de los ecuatorianos deber asignarse a educación, salud, seguridad, vialidad y un sinnúmero de necesidades insatisfechas, no a financiar a bufones o a circos de mal gusto.